Escrito por el arquitecto Alberto Campo Baeza durante el ciclo 2011 desarrollado en la Universidad de Columbia en Nueva York, el título rememora el Principia Mathematica de Isaac Newton. En él mantiene el tono clásico y poético de 'La idea construida' y de 'Pensar con las manos', se resiste a la velocidad de los flujos digitales para detener el tiempo y la gravedad y expresa claramente su apreciación de las constantes en la Arquitectura, de lo esencial entre el equilibrio de la luz, el espacio y la materia.