Apreciada por los viajeros por su exuberancia, su paisaje tropical y el encanto de sus gentes, la isla de Bali es uno de los lugares más espléndidos de la Tierra. Espiritualidad y naturaleza forman parte integral de la vida cotidiana de los balineses, y uno puede entender fácilmente por qué la arquitectura tradicional de la isla encierra ese aire de paz inspirado en el entorno con el que, en ocasiones, incluso llega a fundirse.